domingo, 27 de octubre de 2013

El Justo y los Pecadores

Me pareció ideal presentar el Salmo 1 en la versión "Palabra de Dios para todos".  Dejo al salmista que haga la reflexión por mí.


Afortunado el que no sigue el consejo de los perversos, ni el ejemplo de los pecadores, ni se une con los que andan burlándose de todo.  Al contrario, le gusta la enseñanza del SEÑOR y la estudia día y noche.
 
Será tan fuerte como un árbol plantado junto a corrientes de agua fresca, que da su fruto en el momento adecuado y al que nunca se le caen las hojas. Le irá bien en todo lo que haga.

En cambio, pasa distinto con los perversos.  Ellos son como paja que el viento se lleva lejos.  Por eso, los perversos siempre serán declarados culpables y los pecadores no podrán sentarse al lado de los justos.
El SEÑOR sabe guiar por buen camino a los justos, pero los perversos se desvían y se pierden.

Dios les bendiga.

jueves, 17 de octubre de 2013

¿En verdad estamos perdidos?

No sé si esto le pasa a los demás, pero al menos yo me siento que Puerto Rico se nos está saliendo de las manos.  ¿Cómo es posible que la maldad de algunos acapare de tal manera y opaque las cosas buenas que pasan?  Es que los mismos medios de comunicación se han encargado de quitarnos la esperanza de un Puerto Rico mejor.  Estoy seguro de que si alguien decidiera publicar un periódico que destaque todas las cosas buenas que pasan en este país ocurrirían dos cosas: 1) Tendria el doble de las páginas que tiene el principal periódico y 2) Se iría a la quiebra tan pronto saliera.  Aparte de que recibiría las más duras críticas por no ser un periódico "realista".

Meditando sobre este asunto me doy cuenta de que en verdad no estamos perdidos sino que todo es una ilusión óptica.  No niego que la situación de nuestro país es difícil.  Basta con echarle un vistazo a las Escrituras para darnos cuenta de que los tiempos son malos (Efesios 5:15-17) y de seguro se pondrán peores.

Con esto no me estoy contradiciendo, sino que quiero destacar que estamos pasando por alto otra realidad.  El Espíritu de Dios está aquí y se mueve alrededor de toda la Tierra, incluyendo Puerto Rico.  Nuestra esperanza debería seguir creciendo y debemos darnos cuenta de que, como cuerpo de Cristo, tenemos la obligación de que ese Espíritu se siga moviendo cada día con más poder.  Las buenas noticias de salvación deben seguir proclamándose.  Es importante que sepamos que mientras las fuerzas del mal se encargan de quitarnos la paz y la esperanza, el Espíritu Santo lucha para que la mantengamos.

Cuando aceptamos a Cristo el Espíritu Santo viene a morar en nosotros y somos capaces de experimentar la paz que sobrepasa todo entendimiento; paz que sólo El puede dar (Filipenses 4:7).  ¿Qué creen que pasará si más personas aceptan a Cristo?  Lógicamente, más personas recibirán el Espíritu Santo, lo que resultará en más personas experimentando la paz de Dios.  Esta es la verdadera noticia.
 
Para un Puerto Rico mejor debemos mantenernos firmes en Cristo sabiendo que El tiene el control del mundo.  Como parte de su cuerpo debemos seguir llevando el Evangelio a cada uno de los rincones de este país.  Ese es el compromiso de Puerto Rico en sus Manos.
 
Si sientes en tu corazón ser parte de este ministerio cristiano, comunícate con nosotros a nuestro correo electrónico para que conozcas más.
 
Dios te bendiga.

martes, 15 de octubre de 2013

Oración de reconciliación y para aceptar a Cristo

A continuación comparto ejemplos de la oración de reconciliación y la de aceptar a Cristo.  Dios los bendiga.
 
 
Oración de Reconciliación
Amado Padre Celestial, reconozco que me he apartado de tu presencia.  He permitido que las cosas de este mundo, la carne y el diablo me quiten el amor que una vez experimenté por ti.  He perdido el gozo y la paz que son mi herencia por ser tu hijo(a).
 
Te ruego que me perdones por mi tibieza y desobediencia. Límpiame de toda mi iniquidad.
 
Señor, anhelo experimentar tu maravillosa presencia en mí otra vez.  Quiero ser conformado a la imagen de tu único y precioso hijo y rendirme a él como señor y maestro de mi vida.
 
Reclamo por fe la restauración de mi primer amor y la plenitud del poder del Espíritu Santo.  En el precioso nombre de Jesús te adoro y te alabo.  Amén
 
 
Oración para Aceptar a Cristo
Señor Jesús, gracias por morir en la cruz por mis pecados.  Abro las puertas de mi vida para recibirte como Señor y Salvador.  Gracias por perdonar mis pecados y darme vida eterna.  Toma el control de mi vida. Hazme la clase de persona que quieres que yo sea.  Te lo pido en el nombre de Jesús.  Amén.

lunes, 14 de octubre de 2013

Preparémonos en Oración

Tarde o temprano cada uno de nosotros y nosotras estaremos envueltos en situaciones que ameriten tener que elevar una oración a Dios a favor de un hermano o hermana o para nosotros mismos.  Como parte del ministerio Puerto Rico en sus Manos debemos estar preparados y preparadas.

Es por eso que deseo compartir diferentes tipos de oraciones para que cuando lleguen esos momentos tengan a la mano una guía y puedan ofrecer esas palabras de aliento tan necesarias.  Algunos ejemplos de oraciones que estaremos compartiendo son: oración para aceptar a Cristo, oración de reconciliación, oración de perdón, etc. Si tienen sugerencias de otras oraciones pueden añadir un comentario en el blog o enviarlo a nuestro correo electrónico: puertoricoensusmanos@gmail.com.

En la parte superior de las entradas del blog verán la etiqueta "Oraciones" en donde podrán ver diferentes tipos de oraciones. Esta sección estará siendo actualizada frecuentemente para incluir más oraciones.

Del mismo modo estaremos creando nuevas etiquetas para fácil acceso a nuestras comunicaciones, reflexiones, etc.

Gracias por apoyar este ministerio. Puerto Rico necesita de Cristo y debemos estar preparados en todo momento.

Dios nos continúe bendiciendo.

sábado, 12 de octubre de 2013

Puerto Rico en sus Manos

Puerto Rico en sus Manos es un ministerio cristocéntrico organizado para presentar el plan de salvación de manera directa y concientizando sobre la razón de ser del sacrificio de Cristo.  De esta forma nos comprometemos a llevar a cabo la Gran Comisión encomendada por nuestro Señor Jesucristo.
 
Este ministerio está abierto para cualquier persona que sienta en su corazón el deseo de sembrar las semillas de Reino en la vida de las personas.  Puerto Rico en sus Manos no representa a ninguna denominación religiosa.  Esto significa que cada miembro es libre de perseverar en la iglesia a la que fue llamado por Dios. 
 
Entendemos que el llamado a cumplir con la Gran Comisión trasciende cualquier grupo denominacional.  Sin embargo, para mantener un orden, hemos establecido unos principios básicos de fe en los cuales basar el ministerio.  Estos son:
  1. Creer en Jesucristo como el único camino para llegar al Padre
  2. Creer en la Santísima Trinidad: Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo
  3. Creer en la Biblia como la única fuente de fe y norma de conducta
  4. Creer en la inminente segunda venida de Cristo
Estos principios no constituyen toda nuestra fe, pero sí son esenciales para mantener una armonía entre todos los miembros del ministerio.
 
Como cristianos tenemos el deber ante Dios de predicar el Evangelio a todas las naciones.  Dios está levantando ministerios e Iglesias para llevar a cabo esta mision.  Puerto Rico en sus Manos es un ministerio local que quiere que Puerto Rico conozca y mantenga una relación con nuestro Creador.  Esto no significa que no nos involucraremos en asuntos de índole mundial.
 
Como ministerio, estableceremos reuniones de apoyo para los miembros.  Estudiaremos la Palabra de Dios, discutiremos problemas sociales, planearemos nuestras actividades, entre otros temas según amerite.  Evitaremos en todo momento discutir temas doctrinales para que el propósito y razón de ser del ministerio no se vea afectado.
 
Cada miembro del ministerio tiene la libertad de asistir a diferentes actividades fuera del ministerio teniendo en cuenta que somos representantes de Dios y debemos honrarlo en todos los aspectos de nuestra vida.  No debemos utilizar el nombre del ministerio en otros asuntos que puedan desvirtual nuestra mision.
 
Encomendamos a Dios este ministerio.  Que sea El quien abra y cierre puertas, que su Gloria se manifieste en medio de nosotros y que podamos reflejar la justicia de Cristo a través de cada uno de nosotros.
 
Dios nos bendiga.