A través de la historia la iglesia ha sufrido persecuciones y aún en este siglo eso no ha cambiado. Lamentablemente los medios de comunicación no le dan importancia a este asunto. La muerte de miles de cristianos es informado como pequeñas notas en los periódicos (cuando lo informan) como si se tratara de alguna noticia miscelánea.
No nos debe sorprender que esto ocurra. El diablo tiene una guerra contra la igleisa de Cristo y a la medida que no se cree conciencia estará logrando su objetivo: que nadie ore, pues está consciente del gran poder que tiene la oración. Gracias a Dios que hay personas que a través de los medios electrónicos están dando la lucha para dar a conocer estas cosas.
Sitios como www.puertasabiertas.org, www.opendoors.org, www.persecution.com y www.icommittopray.com, entre otros, nos están informando y a la misma vez exhortando a unirnos en oración por familias que están siendo víctimas de terribles persecuciones por su fe en Cristo. Debemos tener en cuenta que todos somos una familia. Así como sentimos la pérdida de un ser querido, también debemos sentir el sufrimiento de nuestros hermanos perseguidos.
Aunque no nos hayamos dado cuenta, tenemos una gran familia. Dios nos ha hecho sus hijos y tenemos muchísimos hermanos y hermanas. Pidámosle al Señor que nos haga sensibles a esta situación. Dediquemos unos minutos al día a orar para que Dios los proteja, anime y fortalezca.
A través de las páginas mencionadas podemos hacer compromiso de oración y escribir cartas de ánimo y fortaleza.
Bendiciones.
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